La noche de fin de año ha pasado de ser un acontecimiento que reunía a medio país entorno a la televisión con artistas en riguroso directo (quién no recuerda por ejemplo la legendaria actuación de
Sabrina Salerno con esa
pechonalidad rebelándose contra su corpiño) para dar paso a una programación cutre hasta más no poder, con actuaciones enlatadas y grabadas desde Septiembre (y nos quieren hacer creer que es en directo...vamos!) refritos, fragmentos de
zapping y basurita en general.
Zapeando di con el
Canal Norte, uno de los 3 canales locales de
Plasencia, cuya programación ya no es cutre, sino directamente lamentable.
Uno de los personajes más populares de este canal desde hace casi 5 años es
Débora Star (no confundir con Devorah Ombres!). Se trata en realidad del simpar
Arturito, probablemente el primer
gay oficial de mi ilustre ciudad natal.
Arturito es conocido desde hace más de 50 años por sus fulares, sus poses y sobretodo por las saetas que se marca en Semana Santa cada vez que la procesión pasa por debajo de su balcón. Una marica de las que cada vez quedan menos: folklórica, plumona y graciosa.
Lo malo es que bien por razones de edad, económicas o simplemente por afán de notoriedad Arturito se ha convertido en un esperpento mediático
freaky, al estilo de los personajes que salían en Crónicas Marcianas. Así Débora Star es incitada a cantar coplas (desafinadas) que el técnico de sonido versionea haciendo
scratching, o se le pide que baile mientras el de la cámara efectúa unos
zooms que ríete tú del
Zoom Lazarov.
Aunque a fin de cuentas, él parece sentirse a gusto con esta faceta, ya que se siente querido por la gente y allá donde va todo el mundo le reconoce.

Débora Star haciendo de maestra de ceremonias, micrófono y collares hawaianos en ristre, para el especial de Noche Vieja del horripilante Canal Norte T.V